Consejos de Seguridad Vial para este puente

Consejos de Seguridad Vial para este puente

Llega el ansiado Puente de la Constitución y muchos españoles se preparan para salir de vacaciones en estas fechas. De hecho, la Dirección General de Tráfico prevé 6,3 millones de desplazamientos por toda España del 5 al 9 de diciembre de 2019. Fundación CNAE ofrece una serie de consejos muy útiles antes de salir de viaje.


Roberto Ramos, responsable de Formación de la Fundación CNAE ofrece algunos consejos de seguridad vial y mantenimiento del vehìculo muy útiles antes de iniciar cualquier viaje, sobre todo si es de media o larga distancia.

1. El nivel de aceite. Conviene hacer la comprobación con el motor frío y en terreno llano y horizontal. Si está por debajo del mínimo, se debe añadir aceite y acudir a un taller para localizar la causa de la pérdida. Además, es conveniente sustituir periódicamente el aceite según indique el fabricante: mineral: 5.000 – 7.500 km; semisintético: 8.000 – 12.000 km; sintético: 20.000 – 30.000 km. 

2. El nivel del líquido refrigerante. Si es necesario reponerlo, el motor debe estar completamente frío y bajo ningún concepto añadiremos agua del grifo, sino líquido refrigerante, que habrá que sustituir cada 2 ó 3 años. En estas fechas de bajadas de temperaturas es conveniente que el líquido tenga anticongelante y que se ajuste a las temperaturas que vaya a soportar el vehículo.
 
3. Revisar todos los dispositivos de alumbrado, particularmente las luces de cruce, que deben estar lo más altas posible, pero sin deslumbrar al resto de los usuarios. De noche, se debe circular a una velocidad que permita detenerse dentro de la zona iluminada. Existen lámparas halógenas que mejoran la visibilidad con respecto a las luces estándar.
 
4. El nivel del líquido de frenos. Salvo causa de fuerza mayor, no hay que abrir el depósito para proceder a esta comprobación, pues cada vez que se hace el líquido absorbe humedad y pierde cualidades. Si se advierte que el nivel está por debajo del mínimo, lo indicado esllamar o avisar a una grúa y acudir a un taller. El líquido de frenos debe sustituirse también cada 2 o 3 años.
 
5. El filtro de aire. Si está sucio, no permite una aspiración correcta del aire de la calle y produce una combustión incompleta o deficiente. Esto se traduce en menos potencia, más humo negro, más contaminación y problemas con el catalizador, la válvula EGR, etc. Conviene sustituirlo cada 10.000-12.000 km, salvo que se circule por ciudades con mucha polución o caminos de tierra, en cuyo caso es preferible hacerlo antes.
 
6. La presión de los neumáticos. Hay que hacer la comprobación en frío, cada 15 o 30 días. Un neumático bajo de presión se sobrecalienta y puede llegar a reventar. Hay que constatar también que los surcos de la banda de rodadura tienen, como mínimo, 1,6 mm de profundidad. De lo contrario, el agarre será más débil y el aquaplaning aparecerá antes. No conviene olvidar que un 60% de los accidentes que se producen por un fallo mecánico obedecen al desgaste de los neumáticos.

7. Revisar otros elementos de seguridad pasiva, como el cinturón de seguridad, los reposacabezas, los sistemas de retención infantll o los airbags no está de más. Si se ha sufrido un accidente previamente, es preferible sustituirlos por unos nuevos para asegurar que su funcionamiento sea óptimo. 

8. Usar el cinturón de seguridad no solo es obligatorio sino básico para la seguridad de los pasajeros de un vehículo. En caso de choque por alcance, el cinturón evita que el cuerpo se desplace y lo mantendrá sujeto al asiento, evitando lesiones de mayor gravedad. Para colocarlo correctamente hay que tener en cuenta que, una vez se ha enganchado el pretensor al punto de anclaje inferior, hay que tirar de la banda abdominal asegurándose de que quede bien pegada a las espinas ilíacas en la zona de la cadera, después tirar de la banda transversal superior para que el pretensor recoja cinta. La banda transversal debe estar colocada en el pecho. En su parte superior debe estar tocando el hombro pero alejada de la zona del cuello del ocupante para evitar posibles estrangulamientos en caso de colisión. 
 
9. Otro elemento de seguridad pasiva en el que apenas se repara a pesar de su importante papel es el reposacabezas, que debe estar correctamente regulado para evitar el movimiento excesivo del cuello y la posibilidad de sufrir latigazos cervicales en caso de accidente. En caso de colisiones traseras, el cuello realiza dos movimientos (hacia atrás-hiperextensión y hacia abajo-hiperflexión). Si la colisión es delantera, el movimiento del cuello es el contrario, el cuello realiza primero la hiperflexión, hacia abajo, y después, la hiperextensión hacia atrás. Regule su altura de manera que el centro de gravedad de la cabeza (a la altura de los ojos) coincida con la parte resistente del reposacabezas. No lo sitúe más bajo, puede agravar las lesiones. No se apoye en él, es un elemento de seguridad, no de comodidad. Asegúrese de que queda correctamente bloqueado. 
 
10. Evitar el efecto «submarino»: No es conveniente conducir con el abrigo puesto, ya que se resta efectividad al cinturón de seguridad en caso de choque, porque no sujeta de forma correcta el cuerpo al asiento. 

11. Evitar el efecto «elefante»: Nunca hay que dejar nada suelto en el vehículo. Cada objeto suelto en un vehículo puede convertirse en un «arma mortal» en caso de choque ya que su fuerza al salir golpeado es equivalente al resultado de multiplicar su peso por la velocidad a la que circula el vehiculo. Si se trata de un cuerpo humano, que viaja sin sujección en la banqueta trasera, puede salir proyectado hacia delante por un fuerte choque con otro vehículo, con una fuerza de varias toneladas, pudiendo aplastar a los ocupantes de los asientos delanteros.

Por ejemplo: un bolso pequeño que pese 700 g, proyectado a una velocidad de 90 km/h puede golpear un objeto o a una persona con una fuerza equivalente a 63 kg. Un niño de unos 10 kg proyectado hacia delante en un vehículo que circula a 100 km/h puede golpear a los ocupantes de los asientos delanteros con una fuerza equivalente a una tonelada. Un adulto de 75 kg a una velocidad de 60 km/h, sería proyectado con una fuerza equivalente a 4.200 kg. 

12. Evitar la fatiga, la somnolencia y el cansancio. Debe descansar cada 2 horas, o cada 200km. En condiciones meteorológicas adversas la fatiga aparece mucho antes. Llevar bien ventilado el vehículo para no acumular dióxido de carbono (CO2) y, si se fuma, monóxido de carbono (CO), y no abusar de la calefacción, ya que produce somnolencia. La conducción con fatiga  está implicada de forma directa o indirecta en un 30% de los accidentes. 

13. Si tiene que desplazarse en estas fechas no se olvide de incluir en su equipaje una manta, unas linternas (y sus pilas de repuesto), un botiquín básico de primeros auxilios y algo de comida y bebida en el vehículo si se va a circular por carreteras que estén probablemente cortadas. Llevar cadenas, al menos un par, que se tendrán que colocar en el eje motor del vehículo cuando sea obligatorio (conviene practicar cómo colocarlas antes de usarlas, es más dificultoso ponerlas con los dedos ateridos del frío, por lo que tenemos que estar versados en su colocación). Además, conviene llevar el teléfono móvil cargado o disponer de un cargador de móvil adaptable a la corriente del coche. 

14. Planifique el viaje con tiempo, y consulte el estado del tiempo en www.aemet.es y el estado de las carreteras en www.dgt.es antes de salir de viaje. Una vez en el vehículo, recuerde que los mejores copilotos son la paciencia y la prudencia. Lo importante es llegar, no importa cuando.